Lo primero que hacemos es un briefing; un formulario en el que vamos concretando la información inicial y las necesidades del cliente. Se puede realizar de manera online o presencial, pero a nosotros nos gusta conocer al cliente para ponernos cara. Valoramos mucho la planificación y organización de cada proyecto y gracias a este briefing obtendremos la información y recursos que necesitamos para poder ponernos a trabajar.
Con toda la información que hemos recabado, realizamos un planning del proyecto para obtener un presupuesto detallado que incluya todas las labores que vamos a realizar, así como los plazos de tiempo correspondientes al proyecto, que pueden variar en función de las necesidades.
Empezamos a trabajar y realizamos un prototipo del proyecto completamente funcional y online, en el que plasmamos todas las necesidades, páginas e información obtenida del briefing, para poder presentarlo al cliente y que vea las primeras pruebas de su web de manera interactiva.
Tras reunirnos con el cliente y presentarle el prototipo, recabamos todos los cambios e indicaciones que nos dé para que la web tenga el mejor resultado. Nos gusta trabajar siguiendo las indicaciones y dando nuestro punto de vista para que cada proyecto tenga una parte nuestra y del cliente.
Mientras realizamos los cambios, comenzamos con el diseño de las versiones responsive, para móvil y tablet.
Para finalizar el proyecto, siempre realizamos una reunión final en la que junto al cliente revisamos todos los aspectos de la web. No damos un trabajo por terminado hasta que el cliente esta 100% satisfecho con el resultado final.
Ademas, utilizamos esa reunión para explicar las nociones básicas del funcionamiento de la web, acompañándola con las credenciales correspondientes y una pequeña guía sobre los conceptos básicos para manejar y editar tu nuevo espacio online.
